MONUMENTOS DE MACHALA
Aún sigue siendo el personaje que se encarga de cortar y transportar desde las plantaciones bananeras el fruto hasta Puerto Bolívar, cuya producción se remonta a los años 1940. El monumento al Bananero es un elemento que forma parte de la identidad del pueblo de Machala; un elemento cultural que hace referencia al trabajador de la cuadrilla, como se le llama popularmente, y que representa a una forma de vida. En una sencilla pose mientras carga en sus hombros un racimo del fruto que permite su desarrollo económico y social, el trabajador bananero es el personaje imprescindible de Machala y que moldeó en bronce su esfuerzo. El 13 de enero de 1978 se inaugura el popular monumento al bananero, este proyecto se había logrado a través de la gestión del entonces alcalde, José Ugarte Aguilar, quien había solicitado en enero de 1977 al empresario exportador de banano, Luis Noboa, que donara un monumento que rindiera homenaje al esfuerzo del trabajador bananero. Noboa acogió positivamente la petición y contrató al arquitecto y artista cuencano, Vicente Rodas, quien entregó la obra en un año. Un poco más de historia, a partir del auge bananero que se inició alrededor de 1948 la ciudad de Machala experimentó muchos cambios, la economía mejoró notablemente, había plazas de trabajo que se anunciaban día a día. La producción de esta fruta se convirtió rápidamente en la primera actividad económica de esta ciudad, a la que también se sumaron los cantones tropicales de toda la provincia. El desarrollo urbanístico de toda urbe va de la mano de sus actividades comerciales y esta influye en el crecimiento poblacional: a mayor oferta de trabajo, mayor migración y mayor número de habitantes. Machala no fue la excepción para 1950 esta ciudad contaba con alrededor de 9 000 habitantes (7149 sólo en la zona urbana) cifra que se incrementó de forma muy agresiva por la prosperidad del negocio bananero -al menos las dos primeras décadas del “bum”- pues para 1962 la cifra se ubicó en 50 000 habitantes y en 1974 se convirtieron en 95 000 los ciudadanos de Machala.
¿Cuántos de estos nuevos habitantes estaban relacionados con la actividad bananera? La pregunta no tiene una respuesta exacta, pero sabemos que comercialmente -directa o indirectamente- la mayoría de los residentes de Machala tenían que ver con ella. Pareciera que la historia económica de nuestra ciudad se empezaba a escribir a partir de esta actividad agrícola que hasta hoy se mantiene y que ha aportado tanta prosperidad en la vida de los machaleños.
Cuando muchos individuos de diferentes orígenes participan dentro de una misma actividad viven su rutina en un contexto más enriquecedor porque todos integran una comunidad que comienza a descubrir sus costumbres y asimilar las de los otros, el intercambio cultural surge espontáneamente y emerge en este marco la necesidad de identidad como grupo activo y es por esto que los machaleños sintieron esa necesidad de plasmar un símbolo con el que pudieran identificarse y formara parte de su vida urbana.
Monumento al Tren:
Se levanta en la Avenida Ferroviaria en honor a uno de los primeros medios de transporte de épocas pasadas, que marcaron el camino del progreso de nuestra ciudad de Machala, al desarrollo de la economía y el comercio del austro ecuatoriano. En 1905 se inauguró la estación de Ferrocarril en Machala en las calles Juan Montalvo y Bolívar, diseñado por el Arq. Otto Von Buchwald Para muchos ciudadanos, el Monumento al Tren es simplemente un recuerdo del pasó del ferrocarril de Machala, considerando que la estructura de hierro se encuentra descuidada y que de vez en cuando la Municipalidad se acuerda de limpiar las áreas verdes donde se asienta la misma.
Pero esta estructura tiene su historia, considerando que Machala adoleció desde sus inicios por la falta de medios de comunicación y transporte, especialmente relacionado en las vías, el único transporte que hubo fue el marítimo.
Es así que a parte de eso aprovechó el estero Pilo , donde se improvisó un atracadero para las embarcaciones pero que no servía para capacidad máxima. En 1880 acudió la primera embarcación denominada Olmedo que tuvo energía eléctrica abordo y fue impulsada a élise porque no había motores.
En 1862 se intentó construir un ferrocarril entre Machala y Puerto Pilo, dicho ejemplar seria de carretas colocadas sobre rieles y aladas por mulas, para llevar las cargas que desembarcaban las embarcaciones. En el paso del tiempo 1883 con su Presidente Municipal, Catalino Serrano se inauguró Puerto de Bolívar pero al mismo tiempo el inicio de la obra que seria redentora para la Provincia reflejado en el ferrocarril, está obra se llamó empresas de Carros Urbanos y estuvo organizada por los capitalistas entre las familias Pazmiño y Serrano sin embargo por problemas políticos la obra no avanzaba.
Monumento El Aguador:
Pese a la cercanía de Machala con el mar, la ciudad siempre padeció por falta de agua; por ello existían las personas conocidas como aguadores, quienes se encargaban de transportar el agua desde los pozos ubicados a los alrededores de la ciudad con la ayuda de acémilas. En honor a éstas personas, se levanta éste histórico monumento.
En Machala, muchas personas desconocen el monumento "al burro", pero si dan razón por el del Aguador.
"Desde el río Jubones, los oriundos del sector La Primavera, a 2 kilómetros de Machala, transportaban el agua en barriles y la cargaban en burros", afirma don Francisco Cabrera.
Paseo de la juventud:
Como un complemento de lujo en la intersección de las calles Bolívar y Arizaga, se construyó un hermoso espacio de Regeneración denominada Paseo de la Juventud que tiene como principal atractivo una escultura moderna, elaborada en cobre que transmite la sensación de estar en movimiento.
Plazoleta Bolívar Madero Vargas:
Erigida en homenaje al insigne formador de juventudes don Bolívar Madero Vargas, un personaje entusiasta y humanista, precursor del progreso de nuestra Provincia. Esta obra fue iniciada por el Prof. Carlos Falquez, cuando fue Prefecto Provincial de El Oro.
El 29 de noviembre se conmemora un siglo del natalicio de este personaje que desempeñó funciones públicas con el aplauso de sus coterráneos: presidente del Concejo de Machala, diputado y senador por El Oro y presidente de la Junta de Reconstrucción de la misma provincia a raíz de la invasión peruana de 1941.
Fue profesor de geografía y rector del colegio Nueve de Octubre de Machala. Igualmente emprendió en valiosas obras desde la Dirección de Educación de El Oro.
Asumió tareas periodísticas en Guayaquil; en Machala fundó tres quincenarios La Razón, 9 de Mayo y La voz del sur, además de El Nacional de la capital orense, diario que impulsó en sus albores.
Identificado con el deporte estuvo al frente de la Federación Deportiva de El Oro, el Comité de Fútbol de la Federación Deportiva del Guayas y el club Norte América de Guayaquil.
Paseo Cultural Diego Minuche Garrido: